viernes, 14 de septiembre de 2012

Organización social

Los aztecas constituían un pueblo guerrero y poco a poco ocuparon gran parte de América Central. Organizaron el Imperio de la misma manera en que se encontraba organizada Tenochtitlan. La ciudad se encontraba dividida en veinte calpulli o barrios, cuyos pobladores, originalmente, estaban vinculados por lazos de parentesco. El calpulli constituía la unidad mínima de organización social y económica en el imperio azteca y era también un espacio definido dentro de la ciudad. Las tierras de los calpulli se dividían, a su vez, en parcelas de uso privado y parcelas de uso estatal. Los jefes militares de cada calpulli concentraban la mayor cantidad de tierras, mientras que los habitantes de los barrios recibían todos los años una porción de terreno para cultivarla y vivir de ella. Sin embargo, se reservaba también una gran cantidad de tierras que los habitantes de los calpulli debían labrar en beneficio del Estado. Cada calpulli era responsable por su tributo y tenía un jefe que recaudaba y organizaba el trabajo comunal.
Pero en la sociedad azteca, no todas las personas tenían las mismas obligaciones. Para mantener las ciudades, con sus canales y sus diques, sus chinampas, es decir, porciones de tierra de forma rectangular, rodeadas de agua y su ejército, los habitantes entregaban a las autoridades una parte de lo que producían, es decir, un tributo con el que financiaban los gastos militares y religiosos de los aztecas. Una parte de la producción se destinaba al comercio y otra parte era redistribuida.
Pero no todos tributaban. Los gobernantes, los sacerdotes y los guerreros tenían el privilegio de no pagar tributo. En cambio, los campesinos estaban obligados a hacerlo. De esta manera, sostenían al resto de la sociedad. Los varones, mujeres y niños capturados en las batallas, eran esclavos así como también existía la esclavitud por deudas.

Los dioses exigían sacrificios
Los aztecas, como los demás pueblos de América, eran politeístas, es decir, creían en muchos dioses. Creían en el Sol, en la Luna y demás elementos de la Naturaleza, como lugares que consideraban sagrados. Quetzlcoatl, la serpiente emplumada, era uno de los dioses principales de los aztecas. Creían que un día el mundo terminaría violentamente y trataban de retrasar la destrucción con sacrificios humanos. Pedían a los dioses buena salud y bienestar. Por otra parte, el emperador era considerado de orígen divino. Los sacerdotes tenían que preparar las ceremonias religiosas y los juegos rituales. Los sacerdotes eran también encargados de controlar el cumplimiento de las normas y de hacer justicia.
La religión formaba parte de cada momento de la vida de este pueblo, las conquistas la hacían en nombre de estos dioses y en su nombre también realizaban sacrificios humanos
 

COSAS DE MACARENA © 2008. Design By: SkinCorner